EL DESPLAZAMIENTO FORZADO EN COLOMBIA, UN EJEMPLO CLARO DE VIOLACIÓN A LOS DERECHOS HUMANOS.
A partir de la evolución del ser humano y dentro de la historia geográfica, política y social del mundo, ha estado presente el conflicto: concepto percibido en el momento en el que el hombre se mata entre si, por cobardía, por ira, por contagio de enfermedad, por miedo, ideología, por etnia, política y/o religión. Lo que comienza con discusiones en muchos casos, ha terminado en un compromiso entre culpables e inocentes.
Después de la segunda guerra mundial el mundo creó Sociedades de Naciones para la protección de los civiles, es allí donde se suscriben en 1949 los cuatro convenios de Ginebra, uno de los cuales aborda la protección de civiles en los conflictos armados internacionales. Así mismo, en 1951 se estableció la oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), donde se adoptó la convención de las naciones sobre el estatuto para los refugiados. Y es desde aquí, donde la humanidad cuenta con herramientas operativas y jurídicas para abordar el problema de los desterrados por conflictos bélicos. [1]
Con estas acciones jurídicas en pro de la no violencia, no han cesado de existir personas desplazadas: personas forzadas a huir de su lugar de origen o residencia hacia el interior de un mismo estado, o en su efecto hacia otro país. De esta manera, violando los derechos fundamentales de los hombres, el derecho a la vida, a la libertad y a gozar de un ambiente de paz.
Las causas para que se de este fenómeno, es el conflicto entre el Estado y grupos rebeldes, en el caso de Colombia, entre las FARC Y ELN contra el Ejército Nacional; así mismo, por el narcotráfico y cultivos ilícitos. Estas acciones son llevadas a cabo, mediante acciones violentas a bienes, con artefactos y en el más deshumanizante aspecto, con masacres, asesinatos colectivos, y homicidios. Haciendo de esto una amenaza de poder para estos civiles inocentes, para migrar de sus hogares a ciudades aledañas y a grandes urbes.
Este crimen contra la humanidad es reconocido, no por muchos, como un problema de carácter social y político, separando las culturas humanas, con la expulsión de personas y comunidades. Dando origen a la reestructuración territorial, cultural y política del país y el mundo. [2]
Cuando se habla de derechos humanos, se toma como referente la Declaración de los Derechos Humanos, aprobada y proclamada el 10 de diciembre de 1948, por la Asamblea General de las Naciones Unidas. Por esa razón, la situación que afrontan los desplazados de Colombia con respecto a esta declaración es bastante desafortunada. Tal como lo muestra, en el libro Desplazamiento forzado en Colombia de la defensoría del pueblo. Con el desplazamiento forzado, se viola el derecho a la vida, a la libertad, y a la seguridad (artículo 3 de la Declaración Universal de los derechos Humanos). La Violación al derecho a no sufrir penas o tratos crueles, inhumanos o degradantes (artículo 5 de la Declaración Universal de los derechos Humanos), el derecho no ser desterrado (artículo 9 de la Declaración Universal de los derechos Humanos). El derecho a que se le respete su vida privada, su familia y su domicilio (artículo 12 de la Declaración Universal de los derechos Humanos). Al igual que el derecho de toda persona a circular libremente y a elegir su residencia en el territorio de un Estado (artículo 13 de la Declaración Universal de los derechos Humanos).[3] Y por ende el no cumplimiento de los Derechos Fundamentales de los Colombianos fundamentados en la Constitución Política de 1991.
Como se puede concluir, al ver los argumentos con los que se comprueba la existencia en Colombia de los desplazados y del visible incumplimiento a los derechos colombianos e Internacionales que están estipulados para asegurar el bienestar de todos los seres humanos. Verdaderamente se cree en la destrucción entre los hombres, por pretextos diferentes pero que hacen que pobres civiles sean víctimas de actos tan crueles y degradantes vistos en la sociedad. Aunque existen organismos que controlan el desplazamiento y ayudan en la asistencia a estas poblaciones, las cifras en Colombia no han dejado de incrementar y muchos menos se ha hecho visible las soluciones dadas por los gobiernos para esta problemática social.
Todo esto terminará el día en que se tome conciencia humana de los derechos que tenemos, y cuando realmente se luche por hacerlos cumplir.
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